Hno. Álvaro Rodríguez: “La misión más importante que tenemos es vivir como hermanos y hermanas”

“Todo está conectado”, hace parte del título de la Reflexión Lasallista 11, para el periodo 2025 – 2026, y es una expresión que deviene de la Carta Encíclica Laudato si’, del Papa Francisco. “En el documento del Papa aparece nueve veces”, comenta el Hno. Álvaro Rodríguez Echeverría en LaSalleOrg Interviews. Se trata de “una conexión con la naturaleza, con la humanidad (…), que nos invita a estar atentos al grito de los pobres y al grito de la Tierra”, subraya el ex Superior General de los Hermanos de las Escuelas Cristianas.

“Me parece muy acertado de parte del Instituto que nos haga reflexionar sobre este tema tan importante”, agrega el Hno. Álvaro, al subrayar la necesidad de asumir el paso “de un paradigma mecanicista a un paradigma que nos abre a la realidad de que cualquier cosa que hagamos, vivamos, sentimos, está conectada con otras muchas experiencias y realidades. Y creo que esto nos abre a un mundo de relaciones”. 

Para el ex Superior General esta dimensión relacional atraviesa la Misión Lasallista: “estoy convencido que lo fundamental, también en lo educativo, son las relaciones, la capacidad de relacionarnos”. Aún más, “la misión más importante que tenemos es crear un mundo donde todos podamos vivir como hijos e hijas de Dios, como hermanos y hermanas entre nosotros”.  

La experiencia de la fraternidad está anclada a la identidad y a los orígenes del Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, recuerda el Hno. Álvaro: “nuestro primer nombre fue Maestros de las Escuelas Cristianas y Gratuitas. Y Blain nos dice por qué el Fundador muy pronto cambió el nombre de ‘Maestros’ a ‘Hermanos’. Y lo explica muy bien diciendo que lo fundamental es esa capacidad de relacionarnos, realmente como hermanos. Y creo que todos los lasallistas —algunos llevamos el nombre de Hermanos— debe sentirse hermano y hermana de los demás”.

De hecho, en sus años como Superior General (2000 – 2014), pudo constatar cómo las relaciones fraternas están en el ADN Lasallista: “tuve la suerte de visitar 80 países, y para mí lo que más me llamó la atención fue la calidad de las relaciones que se da en el seno de cada obra lasallista, pensando por ejemplo en Asia, donde hay de diversas religiones… y el espíritu de unidad, de fraternidad”.

Asimismo, la fraternidad lasallista se expresa en su opción por la educación de los más pobres. “¡Nacimos para eso!”, asevera el Hno. Álvaro, argumentando que “en la visión que el Fundador nos da en las dos primeras Meditaciones para el Tiempo de Retiro, se inspira en un texto de san Pablo, ‘Dios quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad’. Pero si Dios quiere eso, Dios tiene que poner los medios al alcance de aquellos que son más abandonados, en la expresión del Fundador: ‘más alejados’ de Dios”.

De ahí que el llamado que el Papa León XIV hace en su exhortación apostólica Dilexi te, sobre el amor hacia los pobres, atañe a todos los lasallistas, como ha referido el Hno. Álvaro: “es para nosotros un reafirmar nuestro compromiso con los pobres. Y ya desde hace muchos años hemos tenido esa inclinación, esa experiencia de ir cada vez más hacia los pobres, ‘Hermanos sin fronteras’, y hoy el ‘Proyecto Levadura’, que también nos invita a un compromiso más cercano a los pobres”.

Al finalizar la entrevista sobre la temática de la Reflexión Lasallista 11 y sus documentos inspiradores: Laudato si’ y Fratelli tutti, del Papa Francisco, así como Dilexi te, la primera exhortación apostólica del Papa León XIV, el Hno. Álvaro concluye que “un elemento muy interesante que abarca los tres documentos de los que hemos estado platicando es la ‘cultura del cuidado’. Creo que como lasallistas debemos estar muy abiertos a una cultura del cuidado”.