En el contexto del Año de la Catequesis que ha tenido lugar durante este 2025 en el Instituto de los Hermanos de las Escuelas Cristianas, el Hno. José María Pérez, del Distrito Arlep (La Salle en España y Portugal), profundiza sobre el significado del proyecto catequístico de las primeras generaciones lasalianas, sus trayectorias y sus desafíos actuales.
El Hno. José María es doctor en teología con especialidad en catequética por la Pontificia Universidad de Salamanca (España). Desde hace muchos años ha estado vinculado al Instituto Superior de Ciencias Religiosas y Catequéticas San Pío X de Madrid, en calidad de docente y directivo. Actualmente es el Presidente de la Asociación Española de Catequetas (AECA) y dirige la Revista Sinite.
Formar verdaderos cristianos
Al referirse a los orígenes de los Hermanos de las Escuelas Cristianas y, más concretamente, al proyecto catequístico emprendido por el Fundador y los primeros Hermanos, el Hno. José María recuerda que aquella era “una época de cristiandad, donde la religión era una cosa importante, y lo que quiere hacer La Salle es formar verdaderos cristianos”.
La escuela cristiana fue, entonces, el ámbito para abrazar este imperativo, “una escuela abierta, donde la formación es integral, pero que recalca mucho la importancia que tiene la clase de religión o el catecismo”, como asegura el Hno. José María, al subrayar tres elementos claves del proyecto catequístico de la primera generación lasaliana: “todo lo que se hace en la escuela tiene un carácter apostólico, y por eso [se] habla de la inmersión religiosa; después, que es muy importante el momento del catecismo, el aprender la doctrina. Y una cosa importantísima es que la religión también se aprende en el trato con el educador, por eso hay que mover los corazones, tocar los corazones de los niños”.
“Apóstoles del catecismo”
De ahí que, desde los inicios “la clase de religión, la catequesis, es fundamental para los Hermanos”, como se expresa en la Bula de Aprobación del Instituto. Y esto ha perdurado a través del tiempo, al punto que “el Papa san Pío X nos declaró a los Hermanos ‘apóstoles del catecismo’”, subraya el Hno. José María, de modo que, hasta el día de hoy, “el objetivo fundamental de nuestras escuelas lasalianas es la evangelización. Y la evangelización se hace a través del testimonio y del anuncio explícito del Evangelio, aunque nuestra sociedad es muy diferente a la que tuvo san Juan Bautista de La Salle”.
Justamente, a propósito de los desafíos actuales del proyecto catequístico lasaliano, el Hno. José María afirma que “en una sociedad pluricultural y multirreligiosa, la forma de transmitir el Evangelio tiene que ser diferente”. De ahí que resulta prioritaria la formación permanente de los evangelizadores y, de modo particular, de los profesores que trabajan en los centros educativos lasalianos, pues “un reto muy importante es la formación de los lasalianos en temas teológicos”.
Responder a la necesidades humanas y espirituales
Otro desafío tiene que ver con conocer a los jóvenes y a los niños a quienes queremos evangelizar. “Y para conocerlos, hay que estar cercanos a ellos. Por eso, el educador lasaliano tiene que estar muy cerca de estos jóvenes y estos niños para saber responder a sus necesidades humanas y espirituales”.
Finalmente, el Hno. José María ha señalado la importancia de evangelizar en los diversos contextos religiosos y confesionales en los que se inserta la Misión Educativa Lasaliana, donde se hace necesario “seguir dialogando pero sin renunciar a lo que somos”, con la convicción de que “no hablamos del Evangelio para convertirlos, sino que anunciamos el Evangelio para proponer ese tesoro que tenemos”.
Vea, a continuación, la entrevista completa que el Hno. José María Pérez conceció a LaSalleOrg Interviews.

