Este Comité busca “garantizar que las prácticas del Instituto sean coherentes con las políticas establecidas” en materia de inversiones, ofreciendo recomendaciones o cambios, cuando se estima que es necesario. Se rige por las leyes gubernamentales de responsabilidad fiduciaria y tiene la responsabilidad de determinar los criterios específicos de asignación de inversiones frente a diversas clases de activos, con la prudencia que ello implica y en orden a los objetivos propuestos.

Asimismo, el Comité se encarga de elaborar las políticas y directrices de inversiones que corresponden a cada portafolio, tomando como referencia la doctrina social católica, las perspectivas del mercado de capitales a largo plazo, la tolerancia al riesgo, los requerimientos futuros de flujo de caja, y las implicaciones fiscales.