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Al finalizar el Encuentro de la Región Latinoamericana Lasallista (RELAL) con el Superior General y su Consejo, celebrado en Medellín durante la semana del 04 al 09 de septiembre, el Hno. Armin Luistro —Superior General— se dirigió a los 59 participantes de los ocho Distritos de la RELAL, recordando que “el 46.º Capítulo General nos invita de nuevo a una nueva aventura con el Señor”.

Apelar a la imaginación

En su intervención, el Hno. Armin ha evocado la inédita trayectoria de los lasallistas en América Latina y el Caribe, desde la llegada de los primeros Hermanos de La Salle en la segunda mitad del siglo XIX: “es una historia poderosa que recoge no solo su glorioso pasado, [sino que también] es también una narración fascinante que debería apelar a su imaginación y conmover profundamente sus corazones, tal y como lo hace nuestra propia historia fundacional”, aseguró el religioso filipino.

Ir a las “periferias y fronteras del continente”, sigue siendo un imperativo para la RELAL. “¿Dónde están tu hermano y tu hermana en América Latina y el Caribe?”, es una pregunta impostergable. Asimismo, el Hno. Armin invitó a considerar, en profundidad, las “preguntas incómodas” sugeridas por el Hno. Carlos Gómez, Vicario General, al referirse al Proyecto Levadura: ¿cuándo fue la última vez que tomamos una decisión liminal, audaz y al límite?; ¿la vida comunitaria late en el corazón del proyecto educativo?; ¿responde nuestro servicio educativo a la exclusión, la injusticia, la inequidad?; ¿cuáles de nuestros actuales ministerios o comunidades tienen muros lo suficientemente gruesos como para resistir el poder fermentador de la levadura?

Emprender el viaje hacia las periferias

“Le corresponde a cada uno de ustedes vivir esas preguntas mientras todos emprendemos el viaje hacia las periferias”, aseveró el Superior General, citando uno de los textos bíblicos meditados durante el Encuentro, como motivación a la peregrinación y a salir de la comodidad, “para sentir esa suave brisa en la que el Espíritu del Señor susurra: ‘Remen mar adentro y echen sus redes para pescar’”.

Con sentimientos de agradecimiento, el Hno. Armin exhortó a la RELAL a continuar abrazando “los desafíos para la Iglesia, las fortalezas y oportunidades en nuestras comunidades y ministerios, y los posibles proyectos y estrategias comunes que podrían guiarnos en los próximos años (…) ¡Somos La Salle! ¡Ánimo La Salle!”, agregó.

También comentó, a propósito de una memorable frase del Hno. Álvaro Rodríguez, ex Superior General de los Hermanos de La Salle, que, verdaderamente “nuestra mayor riqueza es ser Hermanos”. Así, “solo soy Hermano en la medida en que actúo como hermano, hablo como hermano, amo como hermano. Solo soy lasallista en la medida en que actúo como lasallista, hablo como lasallista, amo como lasallista. Ojalá podamos celebrar cada día nuestra fraternidad lasallista y continuar haciendo cada acción cada día por amor a Dios”, concluyó.

Son muchos los aprendizajes y los compromisos que brotan de este Encuentro de la RELAL. Así lo expresaron sumariamente los Hermanos Visitadores:

Acompañar la vocación de los Hermanos y los lasallistas

“El acompañamiento y la promoción de la vocación de los Hermanos y los lasallistas” será una prioridad, un compromiso para el Distrito lasallista de Bogotá, como lo ha dicho su Visitador, el Hno. Diego Díaz. Para ello, “la formación es fundamental”, subrayó.

Otra tarea que asumirá el Distrito será “hacer realidad el Proyecto Levadura, especialmente en los contextos donde hay mayor necesidad, ya sea en Colombia, en América Latina o en otras realidades del Instituto”, porque de lo que se trata es de “estar en salida, como nos pide el papa Francisco”.

Construir una dinámica nueva

El Hno. Olavo Dalvit, Visitador del Distrito Brasil-Chile, considera que su principal compromiso tras el Encuentro será “animar y promover que podamos pensar diferente”, a propósito del Proyecto Levadura, para no concentrar todos los esfuerzos “en el mantenimiento de las estructuras —aunque también sea un tema importante—, sino mirar hacia propuestas donde todos se sientan parte”, y ello implica, sin duda, “una conversión interior, una conversión personal”, para “construir dentro de nuestras comunidades una dinámica nueva”.

“Necesitamos mirar hacia las personas, hacia las realidades, entendiendo que cada laico, cada laica, cada Hermano y cada formando hacen parte de ese proceso que necesita ser asumido”, añade el Hno. Olavo, tras el Encuentro celebrado en Medellín.

Apostar por ‘Caminos de transformación’

Para el Visitador del Distrito Antillas – México Sur, el Hno. Francisco Flores, son “muchos compromisos” los que brotan de las jornadas de estos días, y concretamente en relación con el Proyecto Levadura. “Quizás lo más importante es que puede haber muchos planes, textos y publicaciones, pero lo importante es que el contenido llegue al corazón y nos ayude a caminar desde dentro, a mirar desde otra óptica las realidades que tenemos en frente, para responder con toda la energía, con toda esta mirada y estos nuevos ‘Caminos de transformación’ a los que nos invita el Capítulo General”.

En resumen, para el Visitador de Antillas – México Sur, “el compromiso es que estos documentos toquen el alma, el corazón, y que se genere un cambio en las personas que integramos los Distritos, y que este cambio se note en los nuevos ‘Caminos de transformación’”.

Seguir soñando juntos

Estar abiertos a seguir trabajando en red, abriéndonos a las lecciones aprendidas, fortaleciendo [esta red], haciendo sinergias y compartiendo aprendizajes, pero, sobre todo, a seguir soñando juntos”, son acciones prioritarias para el Distrito de Centroamérica – Panamá, según lo expresa su Visitador, el Hno. Manuel Orozco.

Se trata de abrazar no solo los sueños del Distrito, sino los sueños regionales y del Instituto, acota el religioso lasallista, destacando que este imperativo “pasa por la convicción personal, comunitaria —en comunidades de Hermanos y de obras educativas—, para seguir haciendo realidad el Reino de Dios desde la cotidianidad y con acciones concretas”.

Aceptar el desafío de ir a las periferias

Por su parte, el Hno. Fabián Maragliano, Visitador del Distrito Argentina – Paraguay, ha subrayado dos tareas fundamentales que emergen del Encuentro de la RELAL con el Superior General y su Consejo. En primer lugar, “aceptar el desafío de ir a las periferias”, lo cual implica “descubrir cuáles son las periferias que tenemos en Argentina y en Paraguay”.

En segundo lugar, es necesario que existan “comunidades que animen”, y ello implica “revitalizar comunidades de Hermanos y seglares que sean capaces de llevar adelante proyectos en medio de los más pobres, de las periferias”. Trabajar en estos desafíos, comenzar a andar y reforzarlos —si fuera necesario— motivan la misión del Visitador de Argentina – Paraguay tras el Encuentro.

Saber morir para buscar nuevos escenarios

Asimismo, el Visitador del Distrito Norandino, el Hno. Jeanpierre Zambrano, destaca que “es hora de abrir nuevos caminos” tras haber consolidado una nueva experiencia distrital, para “buscar nuevos escenarios”.

Ello implica “saber morir” a algunas realidades “caducas, de muchos años, y abrirnos a nuevas experiencias”, continúa el Hno. Jeanpierre. Si no se da este importante paso, “el Distrito Norandino no va a ser profeta, va a seguir haciendo más de lo mismo”, y “¡es hora se ser profeta y audaz!”, asegura el religioso lasallista.

Asumir los nuevos retos del continente

Desde el punto de vista del Hno. Jorge Antonio Aguilar, Visitador del Distrito Bolivia – Perú, uno de los desafíos que ha suscitado el Encuentro de la RELAL ha sido, por una parte, “el acompañamiento a los Hermanos, la cercanía a ellos”, pero también la necesidad de “prepararse para asumir los retos que nos están planteando las actuales circunstancias” que viven los países latinoamericanos y caribeños.

Frente al fenómeno migratorio que atraviesa el continente, el Hno. Jorge afirma que “mi compromiso es que mis Hermanos y todos nuestros Distritos se comprometan a apoyar a toda esta gente que se está moviendo en Latinoamérica”.

Continuar trabajando en redes

Finalmente, el Hno. César Pablo Campos, responsable de la Pastoral Vocacional del Distrito México Norte, ha manifestado el deseo del equipo de animación distrital de “renovar los acuerdos, esfuerzos y compromisos con la RELAL, para seguir involucrándose en las redes que ya tiene la Región” e “impulsar la pastoral, la comunicación, los procesos de voluntariado, así como la reflexión en torno a los derechos de las infancias y las juventudes”, entre otros aspectos.

Esto implica “seguir sumando fuerzas en cuanto a la formación religiosa de los Hermanos”, para lo cual “hemos creado una fuerte alianza con la zona norte de la RELAL, con los Distritos de Antillas – México Sur, y Centroamérica – Panamá”, en torno a “procesos de formación en común para que los Hermanos y los seglares estemos mejor preparados (…) a fin de ser luz para aquellos que nos rodean”, concluye el religioso lasallista.